sábado, septiembre 22, 2007

Los dioses del Olimpo

No voy a hablar en este artículo de mitología griega ni mucho menos. Este tratará de algo mucho más terrenal y referido a un determinado grupo de personas que sí se creen dioses, ahora no sé si necesariamente del Olimpo o de alguna otra mitología pasada sea ésta maya, inca u otra. Me referiré principalmente a los médicos que, en mi concepto, creen tener la autoridad dada por no sé quién de tutear a todos o a casi todos sus pacientes cuando éstos llegan a sus consultas y sin conocerlos previamente. Esto tal vez, con limitaciones, se puede hacer con personas que son notablemente menores que uno pero que un imberbe doctor treinteañero venga a tratar de "tu" a un paciente ya bastante entradito en años lo encuentro realmente inaceptable.
Y ahí entro a detallar porqué los llamo dioses. Sencillamente porque por haber logrado dicho grado académico, "doctores", creen poder mirar hacia abajo a cualquier otro ciudadano como una forma de distanciarse social y culturalmente. La sociedad se encargó de catalogar a estas personas por encima de todos los demás, lo máximo.

Este tema se me ocurrió escribirlo porque en casa donde estoy en pensión hay un muchachote de 22 años que estudia medicina y llegó aquí arrasando con el tú a todos los mayores que habemos (cincuentones y sesentones). Yo sencillamente no le aguanté la frescura y le hice inmediatamente un parelé. Entre paréntesis, es hijo de doctora y de seguro ahí copió su estilo.

No sé si es cosa de educación, de proveniencia, de tacto o de qué, pero relataré mi caso. Soy hijo de agricultor, me crié en el campo. Mi padre ha tenido una buena cantidad de trabajadores agrícolas, por tanto de una baja educación y de un estrato también bajo. Eso no es ninguna novedad pero siempre nos enseñó a respetar a los mayores independiente de su condición de cualquier tipo y nunca los hijos tuteamos a los trabajadores por muy humildes que fueran. Después ya nosotros de más adultos, si había muchachos jóvenes, ahí sí lo hacíamos. Pero no sé si notan la diferencia. Pienso que la regla de oro para ello debe ser el respeto a las canas, a nuestros mayores, cualquiera sea su condición. De ahí que me molestaba por lo mismo mucho cuando Ricardo Lagos Escobar en sus visitas a terreno tuteaba a todo el mundo. No puede hacerlo. Y ahí la diferencia: Eduardo Frei R-T jamás lo hizo. Qué diferente estilo! ¿Otro tipo de cuna? Ahí digo yo que se nota el "pelo" del bien nacido y educado en casa. Yo siempre digo que hay una diferencia en el estilo de las personas. Hay personas que han sido educadas y otros que sólo han recibido instrucción que es muy distinto. Se nota en un detallito para graficarlo. Si se les "cae la ch" se sabe inmediatamente si son educados o sólo instruídos.

Debo hacer notar que lo que yo menos tengo es ser "clasista". Yo a un trabajador si es mayor que yo siempre lo trataré de Ud.

Y volviendo al gremio médico al próximo imberbe que me empiece a tutear ya le tengo preparada una arenga que será algo así como la siguiente:

-" ¿Ud. me conoce, somos amigos? No, verdad? ¿Entonces, con qué derecho me viene Ud. a tutear? Yo podría ser generacionalmente hablando su padre, soy de una condición social, cultural y económica más que Ud. así que no acepto el trato que Ud. me está dando. Respete a los mayores. Devuélvame mi bono de la consulta y HASTA LUEGO! "

Que haga PLOP como Condorito y ojalá le sirva de lección. De verdad que lo tengo pensado hacer.

Y eso de que haré resaltar mi aparente condición superior en lo social, cultural y económico lo diré para pegarle en los cachos porque eso es lo que ellos pretenden: sentirse superiores. Los dioses. Y no porque yo quiera sacar de verdad una diferencia en dichas categorías. En ello yo no me fijo para nada.

En una próxima nota les contaré cómo me fue con este experimento.